700 personas habitan éste lugar, todas amables pero aún no lo puedo asegurar, simplemente sé que existen personas extrañas, aunque sea su máscara; sé que existen personas que siempre quieren sobresalir, procurar tener un lugar en la mente de otros, perderse en los abismos para tal vez así no soportarse a sí mismos.
Ayer fui atacado por Pasos para morir (Darkyz) mientras dormía, fue extraño ya que Racoon pudo defenderse a la perfección y yo pude realizar mi único poder, el fuego negro.
Todo inició justo antes de dormir, Racoon y yo procurábamos ejercitarnos hasta que, de alguna forma extraña, el piso cambió de lugar, el suelo comenzó a moverse, al parecer hay suelos vivientes aquí como en Wawawaland. Sospeché que algo malo iba a ocurrir ya que se escuchó el silencio y de pronto del suelo comenzaron a brotar, todos los Darkyz que existen, Rage, Lozt Hopes, Desesperation, todos estaban ahí, me encontré de frente a ellos y huimos.
Corrimos lo más que pudimos hasta subir por una colina, monte Nación le llaman. Éste monte conecta con Wawawaland y es donde años atrás enterramos los Wawawalos de antaño a la Reina. Aún recuerdo su triste funeral, Nancy lloraba sin consuelo, las gemelas se miraban tristes y yo, tan solo no lo pude soportar. En aquellos entonces, carecía de monstruo, ninguno de los Wawawalos de antaño teníamos monstruo, sólo la reina, pero al morir, como todo Pet Mental al morir su amo, se petrifica, y su monstruo se halla encima de su tumba esperando algún día su regreso.
Seguíamos corriendo, los Darkyz nos perseguían aún, fue terrible, Racoon quería atacarlos pero no lo dejé, él aún no sabe dominar su rugido. Llevo meses desde que conocí a Racoon, desde que lo conozco no en muchas ocasiones ah utilizado su rugido, ya que es aún muy débil y sale espontáneamente, hemos practicado pero aún no es lo suficientemente fuerte como para derrotar a alguien.
Nos escondimos debajo de una roca, en lo que parecía ser una cueva, al parecer los lugareños habían tallado su interior ya que contenía estaturas, grabados y algunos jeroglíficos, quizás era algún santuario al parecer, a Ilse Tan Ebria, diosa tantan de la celebración.
Exploramos su interior, un ruido se escuchó detrás de nosotros, al voltear se escucharon pasos alrededor de nosotros, pensamos que los Darkyz nos habían seguido al interior. Aguardamos hasta que sonaron los pasos de nuevo, al voltear, el extraño encapuchado estaba ahí y corrió hacia el interior con su Pet Mental.
Nos adentramos aún más tratando de encontrarlo, pero ningún rastro de él. De pronto, una mano me dejó atónito, era Ilse. Me miró con su característica sonrisa y la abrasé, pero no pude ya que al parecer estaba hecha de humo. Me preguntó por varias cosas y comenzamos a platicar, fue extraño, pero al final le pregunte por el encapuchado y me dijo que no lo había visto pero que por las características que le dí , se le hacía familiar. Me dio una pista de quién podría ser, quizás es familia del difunto príncipe Luxo, lo cual, no sería de extrañarme ya que su familia está regada por todos los reinos y regiones, al parecer es su primo lejano nacido en Wawawalandia y que se encuentra en Oblivion tratando de cumplir una meta, la cual desconocemos.
Agradecí por todo despidiéndome de ella y salí del santuario. En la salida la capa del encapuchado estaba ahí, Racoon se aproximó a recogerla, pero de pronto, Rage comenzó a brotar desde el suelo junto con los otros Darkyz. Empezaron a atacarnos, no teníamos opción que defendernos, Racoon se adelantó y arrojó una patada a Lozt Hopes, dejándolo inconsciente, es la primera vez que veía eso, un Darky derrotado por un golpe. Comenzó la batalla y no tenía otra opción que probar algo que no había probado desde los tiempos del príncipe Luxo, arrojé fuego negro.
Manejamos a la perfección la batalla, salimos heridos, pero sanos, lo único que falló es haber dejado escapar al gallo Rage quien huyó a toda velocidad.
Regresamos a las praderas fuera de Oblivion y nos dispusimos a dormir, no sin antes sentir una mirada a lo lejos…
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